(Publicado en Diario Responsable, el 13 de julio de 2008)
En la cumbre que han celebrado los países emergentes, en paralelo a la reunión del G8, tanto la China como la India han reconocido que son incapaces de reducir sus emisiones de CO2 en un 50% desde hoy hasta el 2050.
Lo que me ha sorprendido más, de hecho lo primero no me ha sorprendido nada, es que tanto los países más poderosos como los propios medios de comunicación se han mostrado consternados con la noticia y han lanzado al viento grandilocuentes lamentaciones.
Me parece que nos hemos vuelto todos un poco cínicos. ¿No sabemos desde hace muchos años que estos dos países contribuyen en una cuarta parte del total de emisiones del mundo? ¿Dónde está la sorpresa? Y, sobretodo, ¿dónde están las medidas para paliar este desastre?
Da la sensación que los países del G8 actúan con hipocresía. Nos vamos a lamentar porque hoy es lo que corresponde y mañana tan tranquilos. Cómo vamos a meternos en camisa de once varas si esto afectaría a nuestros bolsillos. Lancemos la frase al viento y...¡a correr!
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